viernes, 31 de julio de 2009

Legado de Yuste

Una nueva cerveza española para comentar. Esta Legado de Yuste pudimos "catarla" algunos kalimotxeros antes de que saliera al mercado en una visita a la fábrica de Heineken de Arano, Navarra. Decir que en aquel momento, hace ya unos años, no le pusimos la atención necesaria a la cata, ya que estábamos concentrados en beber todas las cervezas posibles lo más rápido posible ya que eran gratis. Recuerdo que aquel día fué apoteósico. TODO EL SANTO DIA, TODO, con una cogorza que nos costó mantener al mediodía debido a la escasa oferta de bares abiertos en la Parte Vieja donostiarra.
El otro día me la encontré en un supermercado, y me llevé una para poder comentarla en condiciones, y no me arrepiento. Sin duda esta se trata de una de las mejores cervezas españolas que he probado junto con Mezquita o la Voll Damm.

Es una pena que las cerveceras en españa concedan más recursos y dinero al marketing de un producto que al propio producto, así que mienten más que hablan. Presentan Legado de Yuste como la primera cerveza de abadía de España, aunque habría que añadir que lo es desde que las demás dejaran de fabricarse debido a diferentes problemas que terminaron por tumbar a las cerveceras que las elaboraban. Aunque esto no quita para que sea una buena cerveza. Se elabora según la receta de Flandes que se trajo consigo Carlos V a su retirada en el Monasterio de Yuste.

Una excelente entrada en boca en la que notas enseguida que posee un cuerpo muy potente y un sabor algo acaramelado, llegando el amargor un segundo más tarde, un amargor estupendo, en su justa medida, dando como resultado un trago intenso y de fuerte sabor. Un instante antes de entrar, el propio aroma del brevaje nos avisa de que el trago será interesante. De color cobrizo intenso, bien tirada produce una espuma densa y abundante, resultando muy atractiva en el vaso o jarra.



La botella en su conjunto está elegantemente presentada, con la forma típica de las botellas de cerveza tradicional, más achatada y ancha. Etiqueta que simula antigüedad, como si fuera de color papiro o pergamino antiguo, presentando el nombre del producto, mencionando la elaboración según la tradición de Flandes. Está adornada con una imagen que, imagino, será del propio Monasterio de Yuste (espero que me corrijan si me equivoco) y el sello lacrado del monarca Carlos V.

Contenido de alcohol: 6'5%

VEREDICTO: Una cerveza que gustará a los amantes de las cervezas más "potentes", de sobrada calidad. Para disfrutar.

3 comentarios:

El Cervecero dijo...

Gracias por la bienvenida al mundo de los blog cerveceros.

Saludos.

Andoni dijo...

Amigo El Cervecero, aquí estaremos para lo que quieras!!

Saludos desde el rincón...

Octavio Ortega dijo...

En primer lugar enhorabuena por el post, creo que es de los más completos que hay.

Bajo mi punto de vista es una cerveza que no hay que tomar demasiado fría si queremos saborear ese gustillo a caramelo tan curioso que deja.

Los expertos dicen que no tiene mucho que ver con las cervezas de abadía, sin embargo me pasa lo mismo que a ti, me parece una de las mejores cervezas españolas que podemos encontrar a un precio razonable.